DARE TO DREAM - CAPÍTULO 1

Me levanté de la cama de un salto, y corrí a mi armario. Tenía que estar arreglada en menos de diez minutos. Corrí al baño, me lavé la cara y me desenredé el pelo, dejándolo caer natural. Salgo a toda pastilla hacia la puerta de la calle y al bajar por las escaleras tropecé conmigo misma y por poco me caigo. Cojo las llaves, el móvil, algo de dinero y salgo corriendo calle arriba.
– ¡Adiós mamá! ¡Y buenos días! –grité desde la calle.
Me llamo Ana, Ana Evans. Tengo 16 años y hoy voy a rellenar los papeles de una beca para estudiar en Londres. Desde muy chiquita he estado obsesionada con esa cuidad. Mi madre me dice que es porque siempre he querido ir a la estación de King Cross, la que sale en Harry Potter y ver de primera mano los lugares dónde se grabaron las películas. Pero mi obsesión por Londres tiene otros motivos aparte de Harry Potter. Es todo, son las casas que hay allí, los Starbucks, la ropa que venden en las tiendas…
–Tome, ya lo tengo todo relleno. –le digo a la secretaria. Esta estira la mano y revisa los papeles. Debe estar todo correcto porque me hace un gesto señalando a la puerta. –Muchas gracias por todo. –Le digo, ella alza la cabeza y me sonríe brevemente, luego me voy.

–Bien, la suerte ya está echada. –Me digo a mí misma. Ojala me acepten. Mis notas no son sobresalientes, pero tampoco son malas. Mis amigas Oli y Brenda, las que iba a dejar atrás si me concedían la beca, me solían llamar la chica del 7.
Porque es mi número favorito, porque es mi dorsal en la camiseta del equipo de fútbol del que soy jugadora y porque una vez mis notas fueron todo 7.
Entro a mi casa y enciendo la tele. Ya solo queda esperar. ¿Cuánto puede tardar la carta? ¿Dos días? ¿Tres? ¿Una semana?
Solo espero que hayan aceptado darme la beca. Es mi sueño viajar a Londres. Y estudiar allí sería igual que España, pero vivir allí durante un año sería maravilloso.